Transcript (English)
- [Narrator] At the edge of the solar system, Pluto pushes the boundaries of our understanding of the universe. Nestled within the far-flung Kuiper Belt, the dwarf planet is believed to be one of countless celestial objects left over from the formation of the solar system. While it is one of the Kuiper Belt's largest bodies, Pluto is only half as wide as the contiguous United States, and about 2/3 the size of Earth's Moon, making it easily dwarfed by the solar system's eight true planets.
This tiny world takes 248 Earth years to orbit the Sun, and it does so from an average distance of over 3.6 billion miles or 40 times the space between Earth and the Sun. Such a distance from the solar system's main source of heat causes extreme temperatures on the dwarf planet's surface, between negative 375 and negative 400 degrees Fahrenheit.
The frigid temperatures play a crucial role in shaping the geological composition of Pluto. Its core, likely made of rock and metals, is encapsulated by a mantle made of ice. The dwarf planet's crust is made of rock material and other types of ice, such as frozen carbon monoxide, methane, and nitrogen. These frozen gases cover Pluto's approximately 6.4 million square miles of surface area, which is barely the size of Russia. The icy terrain is much like Earth's with polar ice caps, valleys, planes, and craters. It even has glaciers made of frozen nitrogen, and frozen water on the surface makes giant floating mountains.
Such varied terrain is influenced by the presence of weather patterns or an atmosphere. Pluto's atmosphere is thin and reaches a high altitude due to the dwarf planet's low gravity, which is only about 6% as strong as Earth's. The atmosphere is comprised of nitrogen and methane gases, plus red hydrocarbon particles that scatter sunlight to give Pluto blue skies. Parts of the atmosphere may even freeze and fall like snow.
Floating high above the dwarf planet's atmosphere are five moons. The largest, Charon, is about half the size of Pluto. The four other moons, Nix, Hydra, Kerberos, and Styx, are much smaller. While the eight true planets were discovered by the mid 1800s, Pluto was not spotted until 1930. Pluto, named after the Roman God of the underworld, was considered the ninth planet.
But in 2006, Pluto lost the status. At the time, worlds similar to Pluto were being discovered deeper in the Kuiper Belt. This initiated close scrutiny of Pluto and the definition of a planet. The International Astronomical Union evaluated Pluto based on the characteristics necessary to be a true planet: it must orbit the Sun; is not a moon; and has enough mass and gravitational pull to assume around shape. However, it was the fourth characteristic that compromised Pluto's status. Its inability to clear its orbit of debris. So Pluto was reclassified and arguably demoted from being a true planet to a dwarf planet.
Pluto's story represents our evolving understanding of the universe. There's always more to discover and we are continuously reaching toward it.
Transcripción (Español)
- [Narradora] Al borde del sistema solar, Plutón desafía los límites de nuestro entendimiento del universo. Ubicado dentro del lejano Cinturón de Kuiper, se cree que el planeta enano es uno de los innumerables objetos celestes que quedaron de la formación del sistema solar. Aunque es uno de los cuerpos más grandes del Cinturón de Kuiper, Plutón sólo es la mitad del ancho de los Estados Unidos continentales, y aproximadamente 2/3 del tamaño de la Luna de la Tierra, por lo que los ocho planetas verdaderos del sistema solar lo eclipsan con facilidad.
Este pequeño mundo tarda 248 años terrestres en girar alrededor el Sol, y lo hace desde una distancia promedio de más de 5.7 mil millones de kilómetros o 40 veces el espacio entre la Tierra y el Sol. Dicha distancia de la principal fuente de calor del sistema solar causa temperaturas extremas en la superficie del planeta enano, entre -226 y -240 grados Celsius.
Las temperaturas heladas juegan un papel crucial en la composición geológica de Plutón. Su núcleo, probablemente hecho de roca y metales, está encapsulado por un manto hecho de hielo. La corteza del planeta enano está hecha de material rocoso y otros tipos de hielo, tales como monóxido de carbono, metano y nitrógeno congelados. Estos gases congelados cubren aproximadamente 16.5 millones de kilómetros cuadrados de la superficie de Plutón, que apenas es del tamaño de Rusia. El terreno helado es muy similar al de la Tierra con casquetes polares, valles, llanuras y cráteres. Incluso tiene glaciares hechos de nitrógeno congelado y el agua congelada en la superficie forma gigantescas montañas flotantes.
Un terreno tan variado está influenciada por la presencia de patrones climáticos o una atmósfera. La atmósfera de Plutón es delgada y alcanza una gran altitud debido a la baja gravedad del planeta enano, que es solo alrededor del 6% de la Tierra. La atmósfera está compuesta de nitrógeno y metano, además de partículas de hidrocarburos rojos que dispersan la luz solar para dar a Plutón cielos azules. Partes de la atmósfera incluso pueden congelarse y precipitarse como nieve.
Muy por encima de la atmósfera del planeta enano se encuentran cinco lunas. La más grande, Caronte, es aproximadamente la mitad del tamaño de Plutón. Las otras cuatro lunas, Nix, Hydra, Kerberos y Styx, son mucho más pequeñas. Si bien que los ocho planetas verdaderos fueron descubiertos a mediados del siglo XIX, Plutón no fue avistado hasta 1930. Plutón, nombrado por el Dios romano del inframundo, fue considerado el noveno planeta.
Pero en 2006, Plutón perdió ese estatus. En ese momento, se descubrieron mundos similares a Plutón más adentro en el Cinturón de Kuiper. Esto inició un escrutinio detallado de Plutón y la definición de un planeta. La Unión Astronómica Internacional evaluó a Plutón con base en las características necesarias para ser un planeta verdadero: debe girar alrededor del Sol; no es una luna; y tiene suficiente masa y atracción gravitacional para asumir una forma redonda. Sin embargo, fue la cuarta característica la que afectó el estatus de Plutón. Su incapacidad para limpiar su órbita de escombros. Por lo tanto, Plutón fue reclasificado y se podría decir que fue degradado de ser un planeta verdadero a un planeta enano.
La historia de Plutón representa nuestra comprensión en evolución del universo. Siempre hay más por descubrir y continuamente nos esforzamos por alcanzarlo.